#07 | LA SAL DE LA TIERRA

"...La fotografía es para mí una forma de escritura. Es una pasión, porque amo la luz, pero es también un lenguaje, muy poderoso. Cuando empecé a fotografiar, no tenía límites. Quería ir a cualquier sitio al que me condujera mi curiosidad, donde la belleza me conmoviera. Pero también allí donde se cometiera una injusticia social, para poder contarla..."

fragmento del libro "Memorias: De mi tierra a la Tierra." de Sebastião Salgado.

Pintar con la luz. Así es como define Wim Wenders el oficio del fotógrafo en las primeras líneas del documental "La Sal de la Tierra", sobre la vida y obra de Sebastião Salgado. Wenders lo ve como "un hombre escribiendo y reescribiendo el mundo con luz y sombras", interesante descripción para pensar sobre las impactantes imágenes en blanco y negro, de gran contraste, por las que este fotógrafo sociodocumental se hizo mundialmente reconocido. Potentes imágenes que, en la mayor parte de su carrera, hicieron foco en eventos y situaciones críticas y crueles ocurridas principalmente en países subdesarrollados, en guerra y en situaciones de extrema pobreza y hambre.

Nacido en Mina Gerais, Brasil, en el año 1944, Sebastião Salgado comenzó su carrera como economista. Junto a su esposa, Lélia, se exilia en París y es allí donde descubre su amor por la fotografía. Es, a partir de ese momento, donde toma la arriesgada decisión de dejar su prometedora carrera en economía, para dedicarse por completo a explorar el mundo para contar historias a través de una cámara.

El documental encara de manera respetuosa y delicada, el complicado desafío de plasmar en pantalla el trabajo de un artista, siendo fiel a este, pero buscando crear una obra cinematográfica que capture una idea sobre él que sea significativa y profunda. Wenders logra esto a partir del uso de ciertos recursos audiovisuales simples e interesantes. El primero es el uso, en ciertos momentos, de la filmación en blanco y negro, buscando evocar, a través del uso de la luz, la sombra y el espacio en las composiciones, el estilo de las fotografías de Salgado. Se intercalan, a lo largo del film, tres voces: la del director, la de Sebastião y la de su hijo Juliano, co-realizador del largometraje. Estas voces, acompañadas por videos y fotos, cuentan distintos puntos de vista de la misma historia, la de la vida y carrera del artista. Las famosas fotos en blanco y negro que se suceden frente a nuestros ojos, adquieren una mayor profundidad al escuchar las historias que hay detrás y al ver en transparencia el rostro de Salgado, casi emergiendo desde sus propias creaciones.

Pero a pesar de haber vivido y retratado los mayores horrores que sucedieron en los últimos años de la humanidad, Sebastião logró encontrar una luz en la oscuridad. Junto a su esposa crearon en Brasil el "Instituto Terra", un proyecto de reforestación del bosque subtropical, en el área de Mina Gerais en donde Salgado vivió con su familia durante toda su infancia. La conexión con aspectos medioambientales, le abrió puertas hacia nuevas temáticas, como la Tierra y su belleza natural, retratada en su libro "Génesis" (2013). El film nos permite acercarnos a la visión de este gran artista, nos transmite su sensibilidad, sus inquietudes, en suma, su conexión vital y profunda con el mundo que lo rodea a través de su mejor ojo: su cámara.

TEXTO: Daniela Squarisi

FOTOGRAFÍA: 'La sal de la tierra' original.